Multicolor, maxi, de flores silvestres, mini, en cascada, de papel, de flores secas, original o de toda la vida. No importa como sea tu ramo de novia porque, sin pretenderlo, será sin duda uno de los pequeños protagonistas de la boda. Sabemos que es uno de los elementos que elegirás con más mimo, cuidado y entusiasmo porque, al final, forma parte de tí, de tu esencia y de lo que quieres transmitir a tus invitados. Por eso, en Eurofoto sabemos que merece toda la atención de nuestras cámaras.
Para gustos, los colores y, también, los ramos de novia. ¿Cuántos modelos hay? ¿Hay un tipo de ramo para cada tipo de vestido? ¿Debe esta acorde con el entorno? ¿Sigo la tradición o me lanzo y soy un poco original? Son preguntas que toda novia se ha hecho. El equipo de Eurofoto ha visto –y fotografíado- cientos de ramos de novia y solo os podemos decir una cosa: es uno de los pequeños grandes detalles de un enlace. Y no, nunca pasa desapercibido te cases en Toledo o en la Conchinchina.
Sabemos que centrará muchas miradas pero ¿sabemos de donde viene la tradición? Lo de las flores y los ramos no es ninguna moda. Ya en Grecia y Roma los novios, tanto él como ella, llevaban collares de especias y plantas aromáticas que simbolizaban la esperanza y la fertilidad. Como todo, esto fue evolucionando y en el siglo XIX especias y plantas dejaron paso a flores frescas e, incluso, comestibles. En la época victoriana, se creó todo un lenguaje de las flores -floriografía- y lo habitual era que la novia eligiera su ramo acorde con ese significado. Por ejemplo, la acacia amarilla significa amor secreto, la camelia roja admiración o el clavel rojo indica un corazón que suspira.
Hoy, sin embargo, la elección se basa más en criterios estéticos: tamaño, color o armonía. En cualquier caso, es importante llevarlo correctamente, recto y evitando inclinarlo hacia abajo. Debes pensar que aunque se hagan fotos posando, otras muchas se captarán en momentos espontáneos y el ramo, para lucir como merece, debe estar bien colocado.
Como os decíamos, atraerá miradas pero también la atención especial de los fotógrafos. Al ser un elemento tan imporante del look de la novia, entendemos que no sólo debemos observarlo como un complemento, sino como un elemento con identidad propia que merece su espacio y, por supuesto, su fotografía. El ramo, está en casi todas las etapas del gran día: desde la casa de los novios, al restaurante, pasando por la ceremonia o el reportaje de fotos - en caso de que se haga-. Podemos colocarlo en un lugar especial para la novia, en sus manos o en su regazo. Tambien podemos captar una foto detalle más atípica pero no por ello menos bonita, como la que os mostramos más abajo, tomada en una boda celebrada en Toledo.
El ramo de flores ofrece muchas posibilidades creativas ya que nos permite jugar con los colores y sus contrastes, con el entorno, con otras flores o elementos decorativos. También con instantes especiales. Llegará el momento de lanzarlo a las amigas - si es que lo hacéis- o de entregarlo a una persona muy especial. Ahí estarán los objetivos de Eurofoto, listos para guardar ese instante mágico.
Por último, y aunque suene a obviedad, no olvidéis que el ramo solo estará presente el día del enlace. No aparecerá en las fotos preboda y, posiblemente, tampoco en el reportaje posboda. El vestido, por ejemplo, podrá tener una segunda oportunidad... el ramo, no. Así que si lo considerais importante o especial no dudéis en decirselo al fotógrafo e, incluso, proponedle alguna foto que os haga especial ilusión.
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